4 estrategias exitosas de branding en la distribución
Una marca es un conjunto de imágenes e ideas que representan y diferencian una compañía, un producto o servicio. El branding es el proceso de comunicar la marca para crear una diferenciación de sus principales activos en el mercado.
El branding de la empresa que distribuye puede y debe reflejar sus valores e identidad corporativa en sus distintos canales. Esto se puede percibir mediante el nivel y calidad de atención que brinda su equipo de ventas, facturación y despacho.
“Es importante tomar acciones prácticas y proactivas en el desarrollo de la marca, con el fin de exponenciar tu crecimiento a largo plazo.”
Por estas razones, le detallamos cuatro estrategias de branding exitosas en la operación del distribuidor:
4 estrategias exitosas de branding en la distribución
1. Construir una marca centrada en el cliente: El branding de la empresa no debe considerarse solamente desde una perspectiva interna, sino también desde la externa, en donde se tomen en cuenta las necesidades y perspectivas del cliente que servimos. Poder identificar qué precisan de la empresa, del equipo de ventas, de las condiciones de entrega y de la marca como un todo.
Cada cliente tiene su preferencia de atención, el objetivo es poder adaptar la forma en que se le sirve a cada uno, según sus necesidades de servicio.
2. Mayor interacción con tus clientes sobre el servicio brindado: Generalmente los descubrimientos que provocan cambios positivos en una operación, se realizan con preguntas. ¿En dónde nos estamos quedando cortos?, ¿Qué pudiéramos estar haciendo mejor? Usualmente consideramos las quejas de nuestros clientes como tediosas, sin embargo cambiando el punto de vista, podemos verlas como oportunidades.
Al potenciar la relación con nuestros clientes mediante el rol de los gerentes de cuentas claves o KAM´s, se podrá lograr una mejor interacción con los mismos. El objetivo de esta relación es el de poder identificar oportunidades de mejora en la gestión eficiente del proceso de ventas, facturación, entrega y devoluciones.
3. Involucrar a la fuerza de ventas en los esfuerzos de marca: Generalmente la comunicación con el equipo de ventas es en una sola dirección, de la empresa a ellos. Sin embargo, fortaleciendo la escucha de ideas por parte del equipo de ventas, se puede obtener información que responde a preguntas como: ¿Qué estamos haciendo bien o mal?, ¿Qué está haciendo la competencia?, ¿Cómo podemos reaccionar?
El equipo de ventas representa la cara de la empresa ante los clientes. Por esta razón, debemos de empoderarlos para que estos sean los embajadores # 1 de la marca y de la calidad de servicio con la cual queremos se identifique a la empresa.
4. Utilizar la tecnología para potenciar tu alcance:
Herramientas de encuestas gratuitas para recopilar y analizar información por parte de tus clientes, con el objetivo de generar “insights” relevantes para accionar dentro de la empresa.
Contacto automático de posventa para incentivar la retroalimentación de los clientes. Analizarlos con el fin de establecer planes de acción para mejorar la gestión de ventas (desde el pedido tomado hasta entregado y cobrado).
Herramientas de trabajo internas con el propósito de digitalizar procesos manuales. Lograr que el proceso comercial y operativo sean más eficientes para mejorar la calidad de atención con los clientes. Por ejemplo: disminución de errores por facturación manual, trazabilidad de los pedidos realizados para bodega y el cliente y herramientas prácticas de toma de pedido para vendedores.
El branding no es una carrera de 50 metros, sino una maratón. Se trata de poder crear y comunicar un mensaje con acciones orientadas a mejorar la calidad del servicio que brindamos. Para así asegurar a los clientes como un socio estratégico de la operación del distribuidor.
Y tú, ¿Qué acciones de branding estás desarrollando para exponenciar el crecimiento de tu empresa?